Los niños son un grupo de la población muy proclive a las lesiones traumatológicas. De hecho, una de las primeras causas de consultas médicas suelen ser fracturas infantiles. Esto hace que acudir al traumatólogo infantil se convierta en algo cada vez más demandado. En este artículo de contamos cuáles son las lesiones más frecuentes en niños y cómo prevenirlas.
Las lesiones y fracturas infantiles más frecuentes
El principal motivo por el que los niños padecen más lesiones traumáticas que los adultos es porque su tejido óseo cuenta con unas características fisiológicas específicas. Esto hace que su respuesta a los golpes sea muy diferente y, por tanto, existan determinadas lesiones propias de esta edad.
Los huesos de los niños se encuentran en un proceso de crecimiento. A este respecto, el Dr. Francisco Javier Vázquez, Especialista en Traumatología, nos explica que “el hueso está rodeado de una membrana que se llama periostio y en los niños es muy gruesa y está inervada y llena de terminaciones nerviosas” hasta que posteriormente “al ir creciendo se distiende el periostio”.
Por todo ello, es muy importante conocer las fracturas infantiles y lesiones traumáticas que se dan con mayor frecuencia para poder actuar frente a ellas ya que puede derivar en una incapacidad permanente. Así, estas patologías frecuentes son:
- Fracturas en diversas partes como la tibia, el brazo, la muñeca o el tobillo.
- Esguinces también en varias zonas como el tobillo, la rodilla, el codo o la muñeca.
- Epifisiólisis. Esta patología se caracteriza por ser una fractura en el cartílago de crecimiento.
- Tendinitis. Se trata de la inflamación del tendón.
- Rotura de fibra muscular, conocido como desgarro muscular, es una elongación del músculo.
- Luxaciones, es decir, el desplazamiento de las articulaciones.
- Contusiones. Se trata de un hematoma producto de un golpe de mayor gravedad ya que puede ocasionar daños en los huesos o músculos.
- Deformidades de los huesos como pie plano, por ejemplo, aunque pueden darse en otros sitios como la columna, las piernas o los brazos.
- Displasia de cadera. Se trata de una alteración en el desarrollo de la cadera que puede producir problemas en la estabilidad y movilidad de esa articulación.
- Alteraciones de la marcha caracterizadas por una longitud diferente en los miembros inferiores.
¿Se pueden prevenir las lesiones traumáticas en niños?
Las lesiones traumáticas en niños, como todas las lesiones, pueden prevenirse hasta cierto punto. En el caso de aquellas que sean de origen congénito o bien por herencia genética no es posible prevenirlo pero sí tratarlo a tiempo y llevar un seguimiento exhaustivo del niño. En cuanto a aquellas producidas por un comportamiento adquirido también pueden tratarse a tiempo y prevenir su evolución para mejorar el pronóstico del niño.
No obstante, la mayor parte de las lesiones traumatológicas infantiles son a causa de actividades deportivas. Lo cierto es que el ejercicio físico es indispensable para la salud de los niños, pero debe realizarse con precaución ya que pueden ocasionar problemas.
De hecho, la mayoría de las lesiones deportivas en niños “se producen por sobrecarga por lo que lo más importante es adecuar el ritmo del entrenamiento y la actividad deportiva a la edad del niño y a su desarrollo musculoesquelético”, señala el Dr. Vázquez. De esta forma, con un adecuado calentamiento y un seguimiento adulto de dicha actividad es posible evitar lesiones traumáticas a edades tempranas.
¿Cuál es la función del traumatólogo infantil?
Cuando existen síntomas de patología traumatológica en niños es importante acudir a la mayor brevedad a un traumatólogo infantil. Este especialista se encarga “prevenir las lesiones traumáticas y tratar todas las deformidades tanto congénitas como de desarrollo” explica el traumatólogo.
El Dr. Francisco Javier Vázquez concluye, además, que estas lesiones pueden “hacer que el niño tenga problemas tanto en su desarrollo como en la vida adulta” motivo por el cual la prevención es esencial.